Fernando in memoriam

Este martes 4 de enero falleció, dejando un legado artístico inmenso donde la fauna y flora irradian la alegría y lo maravilloso de nuestro entorno natural.

A Fernando le conocimos en Aranzadi a través de Juan Luis Arsuaga, nuestro director de la revista Munibe, visitamos juntos la cueva de Lezetxiki en Arrasate, donde Jose Miguel Barandiaran halló el resto óseo humano más antiguo encontrado en el País Vasco. Pertenecía a una mujer a la que llamaba Amalur y que reprodujo en una maravillosa acuarela.

Este invierno inauguramos en la casa Antonenea de Lekunberri la exposición “Aralar, La mirada de Kiriku”, donde cuelgan algunas de tus acuarelas. De hecho tu acuarela de Kiriku , el quebrantahuesos, protagoniza la portada del catálogo que íbamos a presentar contigo este mes de enero. Necesitábamos transmitir sabiduría a jóvenes artistas nóveles, ya que eras maestro en comprender la esencia de las cosas. La luz de tus acuarelas permanecerá en nuestras retinas, y la alegría de la vida que nos transmitiste la reproduciremos siempre en la impronta del vino que deja la copa en el mantel, tal y como lo hacías en todos tus trabajos.

La portada de la Aranzadiana de 2022 será una de tus acuarelas, porque Aranzadi y Fernando Fueyo compartimos la pasión por el medioambiente y nuestro entorno natural.

Fernando Fueyo (1945, Vilaller, Valle de Arán, Lérida) es un artista asturiano que vive y trabaja en Avilés. Es considerado uno de los mejores ilustradores de naturaleza a nivel europeo de nuestros tiempos.

Reconocido con diversos premios nacionales e internacionales, ha sido dos veces galardonado con el Premio Internacional de la Sociedad Científica de la Ciencia y la Ilustración, y premio de la Sociedad Geográfico Española, entre otros.

Su trabajo se extiende más allá de la ilustración, y esto ha permitido que la defensa de la vida natural pudiera divulgarse de forma más directa a través de revistas y periódicos como Quercus, Natura, Biologica, Conocer, Ambiental o National Geographic para los que ha ilustrado numerosas especies en peligro, entre otros. Ha publicado varios libros de referencia obligada entre los que destacan “Arboles Notables de Asturias” (1999), “La Historia Cautiva” (2001), “El Mundo de Atapuerca” (2004) “Asturias, Pas del Agua” (2005) “La Historia de la Vida y el Hombre” (2009) y “La Espiga del tiempo” (2010)

Su pasión naturalista le ha llevado a viajar e ilustrar por Europa, Japón, Turquía, Nepal y el Himalaya, con largas paradas en la sierra de Atapuerca de la mano de Juan Luis Arsuaga para quien ha ilustrado numerosos trabajos. Recientemente ha ilustrado el enterramiento más antiguo hallado hasta ahora en la cueva de Panga ya Saidi, Kenia. Se trata de un niño fallecido hace 78.000 años que fue enterrado y al que han bautizado Mtoto. Gracias a la ilustración de Fueyo, este importante hito ha quedado ejemplificado para la historia, convirtiéndose en más cercano para todos.

Fernando Fueyo parte de una observación larga de la naturaleza, de los árboles y de los animales. Durante ese proceso anota, imagina, pero sobre todo elabora mentalmente las formas, los colores, los detalles, las particularidades especiales. Después (y sólo entonces) podrá trasladar sobre sus magníficos papeles, en una suerte de mágica evocación, cuanto ha concebido interiormente. Es su arte, por tanto, genuinamente contemporáneo: la reflexión antecede a la fábrica.

Las obras expuestas en la exposición Aralar, Kirikuren begirada son trabajos realizados con anterioridad que tienen como foco al quebrantahuesos y a otros animales en situación vulnerable. Entre sus dibujos podemos ver y entender toda la vida del majestuoso quebrantahuesos: ilustraciones que muestran el nacimiento de esta ave, hasta su anillamiento y estudio, tan necesario para su salvaguarda y conocimiento. Fueyo retrata este animal con sumo respeto, pasión y admiración. El quebrantahuesos, mediante sus ilustraciones impacta, asombra e incita a conocerlo más de cerca.