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Las mujeres de Aranzadi: Lourdes Ancín

Si se piensa en la biblioteca de Aranzadi hay un rostro que sin duda aparece en nuestras mentes. Lourdes Ancin empezó a trabajar en el año 1991 en la entonces sede de San Telmo.

Las personas que tuvieron la oportunidad de vivir esa etapa, lo hicieron con gran dedicación, solidaridad y esfuerzo colaborando en el desarrollo de Aranzadi. Muchas de ellas fueron mujeres como Lourdes. Cuando se le pregunta, sus ojos se siguen iluminando y se percibe la ilusión con que comenzó por aquel entonces en la creación de una nueva biblioteca.

Día a día gestiona una de las colecciones más importantes de Aranzadi, elemento fundamental para la actividad investigadora de las numerosas y variadas personas que forman la Sociedad. Además, desde su posición en el comité de redacción de las dos series de la revista Munibe, trabaja por su difusión e impacto.

La biblioteca de Aranzadi es su gran pasión, y gracias a su esfuerzo, superando lo limitado de los recursos disponibles, ofrece cada día un servicio profesional y de calidad. Su forma de entenderla como un medio para disfrutar del camino del aprendizaje, hace que una biblioteca especializada como la nuestra, ofrezca un servicio personalizado también para el público general, acompañando y dando respuesta a los intereses de particulares de cada persona usuaria. Una pregunta, una respuesta, y entre tanto, como premio alguna piruleta. No en vano, cada día nos enseña a querer la biblioteca y nos incentiva con detalles que superan la sobriedad de un gran “almacén de libros”. ¡Y qué decir del premio a la mejor lectora!, donde cada año quienes trabajamos en Aranzadi esperamos tener la suerte de ser elegidos. O esas ideas que tiene teatralizando servicios y creando acercamiento a las personas. Sabiendo mirar se ve, y se siente. De hecho, le gustaría que el personal venidero tuviera la oportunidad de vivir la biblioteca con la misma ilusión que ella.

Desde su posición trata de aportar su granito de arena para la normalización de un lenguaje no sexista en sus áreas de trabajo, contribuyendo a mejorar el desarrollo personal y laboral de las mujeres. Es la apuesta continua para lograr la igualdad de todas las personas.

En cuanto al presente 8M, el lema “zuetaz harro” le parece muy apropiado para una entidad como Aranzadi, donde ella ha conocido a muchas mujeres pioneras y ejemplo para las nuevas generaciones.