El Ayuntamiento de Renteria y la Sociedad de Ciencias Aranzadi han presentado un estudio sobre la protección de los insectos polinizadores

Entomología

Lunes, 22 de Marzo, 2021 — CEST

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Para llegar a esta conclusión, la Sociedad de Ciencias Aranzadi, con la colaboración de Paisaia European Landscape Foundation, ha revisado la biología de 490 especies de insectos y 248 de plantas con flores durante el año 2020, en el marco de un trabajo encargado por el Ayuntamiento de Errenteria. Por ello, ha sido necesaria la participación conjunta de especialistas en entomología y botánica.

Este trabajo surge de la necesidad del Ayuntamiento de conocer si la vegetación del Parque de Lau Haizeta se está gestionando de manera que no perjudique a los insectos polinizadores, que realizan un servicio ambiental básico: la polinización de plantas y cultivos alimenticios. Esta preocupación municipal se centra sobre todo en las cortas selectivas de vegetación que se realizan en ciertas áreas para mantener accesos y espacios abiertos con fines recreativos y ganaderos, pero también para diversificar el paisaje y controlar a las plantas invasoras en tres tipos de hábitat de San Marcos y Txoritokieta: zonas forestales con claros y caminos, prados con o sin matorrales y pastos ganaderos.

En cuanto a la importancia de los polinizadores, se estima que cerca de un 80% de las plantas con flores de nuestro planeta, sean silvestres o de cultivos, dependen, aunque sea en parte, de la polinización por insectos. Éstos se encuentran en regresión global (fumigaciones, contaminación, pérdida de hábitats, cambio climático) y cuentan con varias especies amenazadas. Un papel especialmente importante lo juegan los himenópteros (abejas, avispas), dípteros (varias especies de moscas), lepidópteros (mariposas, polillas) y coleópteros (varias especies de escarabajos). Estos cuatro grupos han sido analizados en Lau Haizeta.

Los resultados del estudio muestran que el número de cortas actual resulta excesivo y por tanto perjudicial para las plantas con flores. Además, en algunos casos las fechas interfieren con la época de vuelo y alimentación de los insectos polinizadores. Por ello, se remarca la necesidad de reducir la frecuencia anual de cortas y modificar las fechas de las mismas para minimizar su impacto sobre los ciclos de vida de polinizadores y de las flores.

El objetivo de tal medida consiste en abastecer a los polinizadores de una mayor variedad y disponibilidad temporal de flores y polen. Finalmente, se sugieren otras acciones encaminadas a incrementar zonas de refugio y anidamiento de los polinizadores y a disminuir la competencia generada por las plantas invasoras sobre las nativas.