A la venta el libro de la calzada romana Tarraco-Oiasso en Navarra

Arqueología / Yacimiento arqueológico

Martes, 15 de Marzo, 2022 — CEST

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En este trabajo presentamos una propuesta del recorrido por Navarra de la calzada Tarraco-Oiasso, así como otras tres rutas mineras romanas que enlazaban las zonas de explotación de los recursos con las principales vías del Imperio. Así mismo se exponen los resultados de la investigación realizada, poniendo en relieve la importancia que tuvieron estas vías en la articulación del territorio norte de los vascones. La investigación llevada a cabo permite proponer, como hipótesis de trabajo, un trazado en base a las evidencias descubiertas.

Se constata un evidente nudo de comunicaciones bajo el yacimiento romano-republicano de Iturrotz, en el Valle de Longida, hasta donde llega esta vía procedente de Caesaraugusta y donde, en opinión de los autores, confluyen cuatro calzadas.

Del Sureste vendría la Tarraco-Oiasso que continúa hasta las cercanías de Pompelo para en Arre (Ezkabarte) tomar la cuenca del río Ulzama hasta Ostiz y desde aquí seguiría el cauce del río Mediano hasta alcanzar Orkin-Arraitz, ascendiendo hasta la divisoria de aguas en Bentaxar, y por el collado de Txaruta descender a la cuenca del Bidasoa en Doneztebe-Santesteban y de este modo seguir el cauce del rio hasta llegar a Irún.

Si bien en partes del recorrido los vestigios son escasos, debido sobre todo a la alta antropización del territorio y a la superposición de las actuales carreteras, la utilización de los pasillos naturales se ajusta bien con las características que los ingenieros romanos habrían buscado para una vía de esta categoría.

También se llega a esta conclusión al no haber encontrado, de Pamplona hacia el norte, caminos alternativos con suficiente entidad como para compararlos con esta propuesta. Se han recorrido distintos itinerarios tanto en Basaburua como en Ulzama o en Atez, trayectos que, en opinión de los autores, no reúnen las condiciones que necesitaría una vía comercial, además de ser también más largos para llegar al mismo destino.

No cabe duda de que algunas de estas rutas fueran utilizadas por los romanos en la conquista, pues al tratarse de caminos naturales usados por los nativos también habrían sido utilizados por los militares romanos para la penetración en el territorio.

Y aunque la gran alteración causada con las últimas obras de mejora de la carretera entre Endarlatsa y Hendaia no ha permitido encontrar indicios en este tramo, es evidente que esta vía llegaba hasta Irún, por más que también se utilizara la navegación por el rio Bidasoa.

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